Pon remedio a la bronquiolitis del bebé con fisioterapia respiratoria - 27/10/2016 - Sin categoría
Fisioterapia respiratoria en pediatría
La bronquiolitis es una infección respiratoria caracterizada por la hinchazón y acumulación de mucosidad en los bronquiolos (las vías aéreas más pequeñas de los pulmones) y que, por lo general, es causada por el Virus Respiratorio Sincitial (VRS) u otras infecciones virales como; el adenovirus, la influenza y la parainfluenza.
Esta infección suele afectar a niños menores de 2 años, especialmente a aquellos que tienen entre 3 y 6 meses de edad,y se puede propagar por contacto directo con las secreciones de nariz y garganta de alguien enfermo, por ejemplo, al toser o estornudar cerca del bebé o sobre sus objetos.
A parte de esto, hay factores que implican un mayor riesgo de bronquiolitis; nacer de forma prematura, no ser amamantado, estar expuesto a humo del tabaco o vivir en condiciones de hacinamiento.
Algunos de los síntomas más comunes son pitidos o sibilancias, dificultades respiratorias, fatiga (ya que el bebé se despierta más durante la noche), disminución del apetito (por la sensación de ahogamiento al intentar tragar), respiración más rápida, tiraje y aleteo nasal. En casos graves, la piel se vuelve morada lo que indica falta de oxígeno y la necesidad de un tratamiento urgente.
En función de la gravedad de la bronquiolitis, el tratamiento puede requerir de medicinas, no de antibióticos porque no son efectivos contra las infecciones virales. También existen medidas parar aliviar los síntomas en casa como procurar que el niño beba mucho líquido, usar un humidificador para ayudar a reducir la mucosidad y procurar que descanse mucho.
La fisioterapia respiratoria puede ayudar a aliviar todos los síntomas antes nombrados mediante masajes que ayuden a eliminar el cúmulo de secreciones de los pulmones, lo que supone que no se deba emplear tanta medicación. Esta técnica sólo puede realizarse cuando haya mucosidad en el pulmón, ya que la fisioterapia no está indicada en caso contrario, pero es un tratamiento igualmente válido para bronquitis o neumonías.
Se recomienda aplicar esta técnica siempre antes de que el niño coma para evitar vómitos y los resultados son inmediatos ya que, desde la primera sesión, el niño respira mejor y sin tanto ruido.
Los golpes en la espalda o clapping están totalmente contraindicados porque produce broncoespasmo (el cierre de los bronquios) y disminuye la saturación. Lo que sí se recomienda a los padres es que realicen lavados nasales al niño antes de comer y de dormir y siempre que oigan ruidos al respirar, así como intentar que el bebé beba más agua.