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Casi todos hemos experimentado alguna vez un pequeño “mareo”, una sensación breve que puede darse en algún momento de debilidad, en cambios de la presión arterial, entre otros motivos. Sin embargo, para otras personas esta molestia es repetida o constante, en estos casos puede tener relación con un trastorno del equilibro o síndromes vestibulares y debe ser estudiado por un profesional.
¿Cómo contribuye la fisioterapia en estos casos?
Aunque es poco conocida, la fisioterapia vestibular es efectiva a la hora de tratar a un paciente con síntomas vertiginosos. Esta rama de la fisioterapia agrupa un conjunto de ejercicios y técnicas que contribuyen mejorar la estabilidad y sensaciones negativas en el paciente.
El trabajo del fisioterapeuta, en estos casos, consiste en valorar y preparar un tratamiento personalizado al paciente en función de equilibración, la postura y las alteraciones del tono postural.
¿Cómo empiezan estos casos?
El “mareo” (como se denomina coloquialmente) puede comprender una serie de sensaciones de vértigos, inestabilidad, sensación de desmayo, pesadez en la cabeza, visión borrosa, etc.
Los principales síntomas de un trastorno del equilibrio son:
¿Qué causa los trastornos del equilibrio?
Entre las principales causas de los problemas de equilibrio se incluyen los efectos adversos de ciertos medicamentos, infecciones del oído, lesiones en la cabeza u otras afecciones relacionadas con el oído interno, donde se encuentra el sentido del equilibrio
El envejecimiento también está relacionado con el riesgo de padecer problemas de equilibrio, aunque muchos de estos trastornos empiezan de repente, a veces sin una causa definida.
Estos son algunos de los síndromes vestibulares más comunes: